Los 9 "por si acaso" a los que deberías decir adiós en tu casa si quieres ahorrar en mudanzas y guardamuebles
1 de septiembre de 2024
1 de septiembre de 2024
¡Madre mía cuántas cosas guardamos en casa… y para no utilizar! Aunque lo neguemos, nos parecemos a nuestras madres y a sus frases. Pero es que tienen verdad; y esta verdad se ve amplificada cuando estamos organizando mudanzas y guardamuebles cuando por ejemplo vamos a hacer una reforma. Reconócelo, estamos rodeados de los «por si acaso» y esto lo único que provoca es que nuestro traslado se complique, aumentando incluso el coste del servicio. En este artículo te vamos a dar las claves para acabar de un plumazo con todos esos «por si acaso» y hacerte la vida más fácil…
¿Alguna vez te has visto en la situación de tener que organizar mudanzas y guardamuebles y has sido consciente de la de cosas inservibles que guardamos en casa y que nunca usamos? Son los famosos «por si acaso». Pero no esos «por lo que pueda pasar» que cuando vamos de vacaciones metemos en la maleta; no. Hablamos de todos esos enseres que un día pensamos que era buena idea guardar, lo hicimos y ahí quedaron. Las típicas cosas que guardamos “por si lo necesitamos”, y al final, la realidad es que no.
Mira el listado de esos «por si acaso» que te hemos preparado y dime tú si no vas a recibir una buena noticia cuando preguntes cuánto cuesta una mudanza con guardamuebles… ¡la de dinero que vas a ahorrar si consigues hacer desaparecer todas esas cosas que no necesitas!
1. Bolsas por toda la casa
En mayor o menor medida todos hemos desarrollado la «bolsamanía». Las tenemos de plástico, tela o papel; de todos los tamaños, formas y colores posibles. Podríamos guardar en ellas todos nuestros enseres y probablemente los del vecino también. El problema de este «por si acaso» es que ocupan mucho, llenándonos cajones de la cocina y de los armarios de las habitaciones. ¿Te imaginas cajas de mudanzas llenas de bolsas?
2. Gomas elásticas
Sin ser tan grave como lo de las bolsas, las gomas elásticas pueblan nuestros cajones de baños y cocinas. Las guardamos para unir bolis y lápices que nunca utilizaremos; para asegurar paquetes en el congelador que no necesitan; o incluso -en lo más profundo de nuestra imaginación- intentar abrir la tapa de un frasco bien cerrado (esto, como lo de las frases del principio del artículo, son cosas muy de madre 😜).
3. Móviles antiguos, cargadores y baterías
¿Quién no tiene en el mueble del salón el primer «Alcatel» que usamos o el anterior móvil al que se nos rompió la pantalla y lo guardamos por si el que tenemos ahora deja de funcionar? ¿Y qué nos dices de los miles de kilos de cables y cargadores que aún conservamos? Están las baterías y los cargadores pero ni rastro de los aparatos a los que pertenecían.
4. Ropa y calzado
De los «por si acaso» más peligrosos. Ingentes cantidades de estos elementos deambulan por nuestros armarios haciendo del embalaje de la mudanza y guardamuebles una carrera de obstáculos. Desde esos pantalones de campana noventeros porque sabremos que la moda volverá, pasando por los zapatos que nos compramos para una boda y por ese calcetín desparejado que conservamos con la esperanza de que el otro aparezca.
5. Toallas y ropa de casa
En Mudanzas Carlos Rodriguez creemos que no hay vida suficiente para secarnos con todas las toallas que guardamos. ¿Y qué nos dices de las mantas? En pleno proceso de cambio climático, con cada vez menos días de frío y nuestras casas mejor preparados para combatirlo, tenemos al menos una manta para cada día de la semana. 💡 Un consejo: dale una segunda vida a esta ropa y busca dónde donar antes de una mudanza con guardamuebles.
6. Cajas de cartón vacías
¡Ojo, no confundir con las cajas de mudanzas! Fundamentales en todas las mudanzas en Bilbao y Bizkaia. Hablamos de esos envases de aparatos que conservamos o de esa otra caja que «que buena pinta tiene y que nos puede servir» y nunca llegamos a utilizar. Habitantes habituales de los trasteros, las cajas de cartón son un «por si acaso» muy pero que muy común.
7. Apuntes, papeles y documentos varios
Los primeros dibus del cole 🎨, los apuntes de la carrera, documentación antigua de la empresa en la que igual ya ni trabajamos,… Un error guardar estos enseres. Van a hacer que aumente el volumen y el precio de las mudanzas y guardamuebles y lo que es peor: nunca los vamos a volver a consultar.
8. Los duplicados
Los temidos duplicados. Cuando algún producto -generalmente electrodomésticos y aparatos electrónicos- no funciona bien, compramos otro, y somos incapaces de tirar, donar o reciclar el antiguo. Al final, terminamos guardando el producto usado, por si algún día nos falla el nuevo, y provocamos que nuestro servicio de mudanzas y guardamuebles tenga más cajas de las necesarias.
9. Los misterios
Este es sin lugar a dudas el «por si acaso» más difícil de explicar: lo que no sabes lo qué es o para qué sirve pero aún así lo guardas. Abanico amplio de objetos con formas y dimensiones varias que terminan en lo más profundo de los guardamuebles en contenedores. Los guardamos con la vaga esperanza de, en primer lugar, acordarnos de que los tenemos ahí, y en segundo lugar que quizás nos puedan servir para algo.
Los «por si acaso» lo único que van a provocar es complicarte la vida cuanto tengas que contratar servicios de guardamuebles y mudanzas. Entre los factores que determinan los precios de guardamuebles está el volumen. A más volumen, más precio. Y es aquí donde todos estos «por lo que pueda pasar» te van a jugar una mala pasada.
Además de esto último, existen otros factores que inciden en el precio del alquiler de guardamuebles.
Respira hondo… mira a tu alrededor y empieza por aquello que podrías desechar sin sentirte comprometida por sentimientos nostálgicos. Siempre te va a resultar más sencillo ir de lo pequeño a lo grande. Comienza por los cajones del baño y cuando hayas ido cogiendo confianza podrás enfrentarte a empresas mayores. Existen las diez normas infalibles para aprender a tirar los «por si acaso». La clave está en perseverar.
Tirar no solo libera espacio en nuestro hogar y nos ayuda a decir «bye, bye» a los temidos «por si caso»; también nos ayuda a desprendernos del pasado, mantener nuestra casa limpia y ordenada y -aquí está lo importante- reducir la factura de los servicios de mudanzas y guardamuebles.
«Mudanzas Carlos Rodriguez, tu mudanza en buenas manos«